Townsmen para Android es un juego de construcción medieval en el que, paso a paso, deberás hacer crecer a tu aldea mediante edificios y objetos de todo tipo. Su buen nivel gráfico y la gran variedad de mapas que tiene lo convierten en una opción indispensable para aquellos que adoran estar al frente de una ciudad.

Nada más iniciar la aplicación, te recomiendo encarecidamente que juegues el tutorial pues aunque la mecánica de juego no es demasiado compleja, te ahorrará mucho tiempo a largo plazo. En cuanto lo completes, ya podrás acceder a un gran abanico de mapas y situaciones.

En todos ellos el objetivo siempre es el mismo: hacer crecer tu pobre aldea hasta convertirla en un auténtico referente del continente. Sin embargo, las condiciones sobre las que tienes que llevar a cabo esta importante misión sí que varían. Por ejemplo, puedes seleccionar un escenario en el que haya sequía, una crisis económica o una situación social tensa. Estas pequeñas modificaciones cambiarán por completo la forma en la que debes desarrollarte.

Es realmente sorprendente la enorme cantidad de edificios que hay en Townsmen. Se cuentan por decenas y todos tienen su utilidad dentro del funcionamiento de la ciudad, desde un simple aserradero o granja hasta casas para los habitantes. Eso sí, algo que espero que mejoren es que puedas mover los edificios una vez construidos.

El apartado gráfico tampoco tiene desperdicio. Si bien no sería justo del todo decir que es excepcional, su nivel de detalle es de notable alto. Todo el mapa está perfectamente definido y en gráficos de alta resolución con multitud de animaciones distintas. Es de esos juegos en los que uno hace zoom encantado para observar tanto los edificios como el entorno de cerca.

Sin embargo, Townsmen también tiene cosas negativas. Para mí la más importante es el enorme banner que hay colocado en la parte superior y que ocupa casi un 25% de la pantalla, limitando muchísimo el espacio para jugar. Es cierto que puedes desactivarlo, pero para ello has de comprar la versión completa y eso es algo que no todos estamos dispuestos a hacer.

Resumiendo, Townsmen no es el típico juego de construcción enfocado a lo social y casual. Tiene una gran profundidad y sientes realmente como la ciudad evoluciona poco a poco. Sus cosas buenas superan con creces a las negativas, y la diversión está más que asegurada. Así que ponte manos a la obra y ayuda a levantar una metrópolis medieval sin igual.